Nuestra misión es financiar y atraer más fondos para proyectos de gran repercusión basados en las mejores prácticas establecidas y reconocidas a nivel internacional, con el fin de aumentar la seguridad vial y reducir al mínimo y, en última instancia, acabar con los traumatismos que los accidentes de tráfico ocasionan a los usuarios de las carreteras.
Cuando el mundo se une de verdad para resolver un problema, se suelen producir avances sorprendentes.
A pesar de que cada vez es mayor el compromiso político con la seguridad vial en el mundo, las cifras de 1,3 millones de muertes evitables y 50 millones de heridos al año por accidentes de tráfico constituyen un coste inadmisible para nuestra sociedad que prácticamente no ha cambiado en los últimos 20 años.
Se pueden salvar cientos de miles de vidas cada año si nos unimos para lograr una movilidad segura.
Para ello, es necesaria la determinación mundial y la financiación.
El Fondo de las Naciones Unidas para la Seguridad Vial se creó en 2018 para aprovechar el poder de convocatoria y la experiencia de la ONU para consolidar las medidas para lograrlo.
El Fondo se estableció como un fondo fiduciario de múltiples socios de las Naciones Unidas. Se lanzó oficialmente en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York el 12 de abril de 2018, en presencia del Vicesecretario General de las Naciones Unidas, el Enviado especial del Secretario General para la Seguridad Vial y representantes de organismos de las Naciones Unidas, Estados Miembros, el sector privado, así como otras partes interesadas en la seguridad vial.
La seguridad es lo primero
Las muertes y lesiones por accidentes de tráfico son evitables si damos prioridad a la seguridad.
El objetivo del Fondo de Seguridad Vial de las Naciones Unidas es salvar vidas y proteger los sueños y el futuro de las próximas generaciones.
Ayudamos a los países de ingresos medios y bajos a poner en marcha sistemas de seguridad de eficacia probada que protejan a sus ciudadanos y visitantes de los posibles riesgos de los viajes por carretera.
Para ello, financiamos proyectos que los organismos de las Naciones Unidas participantes llevan a cabo junto a nuestros socios, con el fin de crear las prácticas, las políticas, las normativas y la capacidad necesarias para poner en marcha estos sistemas.
El Fondo se guía por los principios de los sistemas seguros incluidos en su Plan de Acción del Marco Mundial para la Seguridad Vial, los cuales proporcionan un marco general para las intervenciones que (cuando se llevan a cabo de forma sistemática por etapas y a escala) conducirán a una fuerte reducción del número de muertos y heridos en accidentes de tráfico.
Al proporcionar una financiación inicial para desarrollar capacidades, impulsar actuaciones y generar resultados tangibles, también desbloqueamos financiación nacional e internacional adicional y a largo plazo con el fin de mejorar la seguridad vial.
La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible reconoce que la seguridad vial es un requisito indispensable para garantizar la prosperidad en la vida, fomentar el bienestar y hacer que las vías públicas sean inclusivas, seguras, resilientes y sostenibles.
Valiéndose del poder de convocatoria y de los conocimientos técnicos de las organizaciones de la ONU, el Fondo puede potenciar los esfuerzos de colaboración para ayudar a mejorar la seguridad vial en todo el mundo mediante:
- La recopilación de conocimientos sobre diversos aspectos de la seguridad vial en los proyectos e iniciativas en curso
- La identificación de deficiencias y la vinculación de las prioridades con el fin de lograr sinergias y maximizar el impacto
- Garantizar la complementariedad y evitar la duplicación de las iniciativas mundiales de seguridad vial
- La coordinación de las prioridades de los esfuerzos en materia de seguridad vial en un marco integral
- La potenciación de las asociaciones, reuniendo a las principales partes interesadas
- Aprovechar el apoyo financiero y poner en común los recursos
Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)
La movilidad segura es la mayor "victoria rápida" que el mundo puede lograr para reducir la mortalidad y cumplir los ODS en materia de salud, ciudades, pobreza, crecimiento económico y otros aspectos.
La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible reconoce que la seguridad vial es un requisito indispensable para garantizar la prosperidad en la vida, fomentar el bienestar y hacer que las vías públicas sean inclusivas, seguras, resilientes y sostenibles.
El ODS 3.6 compromete a la comunidad mundial a reducir a la mitad las muertes por accidentes de tráfico para el año 2030 y el ODS 11.2 aboga por mejorar la seguridad vial a través de un mejor acceso y el uso de la movilidad sostenible.
Además, al evitar millones de lesiones relacionadas con el tráfico, los sistemas sanitarios de todo el mundo dispondrán de más capacidad para tratar otros problemas importantes.
Millones de personas podrán llevar una vida productiva y, al hacerlo, impulsarán el crecimiento económico y construirán sus comunidades.